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Nabil * y su familia eran refugiados y se habían instalado hace poco en un pequeño apartamento que estaba cerca de un cristiano llamado Greg. Nabil encontró trabajo en la posición más baja de la escala de ingresos, como trabajador manual.
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Sin embargo un día Nabil sufrió una grave lesión en el tobillo que lo mantuvo fuera del trabajo. Greg comenzó a visitar el apartamento de Nabil regularmente para ayudarlo a rehabilitarse, según un informe de Frontiers.
No obstante luego de meses de terapia y descanso, el tobillo de Nabil continuaba tan hinchado que sólo podía dar unos cuantos pasos por el apartamento. Parecía que esto llevaría varios meses más antes de que él estuviera libre de dolor y capaz de volver a su exigente trabajo físico.
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Pero un día Greg llamó a Nabil y se sorprendió por una urgencia en la voz de Nabil. “Greg, necesito verte de inmediato, ven y trae tu Biblia.”
Cuando Greg entró en el apartamento, Nabil ni siquiera saludó. “Un hombre de blanco vino a mí en una visión y me dijo que te llame para que me des una Biblia”, dijo.
De repente, Greg notó que su amigo caminaba sin fuerzas. -¿Qué le ha pasado a tu tobillo? preguntó.
“Un hombre de blanco lo curó”, explicó Nabil. Algunas noches atras, este hombre de blanco se le apareció en un sueño y lo condujo a un hermoso paraíso de jardín. A la entrada del jardín, el hombre le dijo que debía leer la Biblia y que lo llevaría a la vida, según Frontiers.
“Entonces le conté al hombre sobre mi tobillo lesionado, él puso sus manos sobre él, y fue sanado.”
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Nabil observó cómo la figura de Cristo bendecía a cada uno de sus hijos. Su hijo de 1 año, nacido con una condición genética, se presentó. El hombre puso la mano sobre el muchacho y le dijo a Nabil: “Yo curaré a tu hijo, él estará bien”.
Cuando Nabil se despertó, se tocó el tobillo y supo que estaba curado. Fue a ver a su hijo y se sorprendió al ver una diferencia en su aspecto. Dentro de tres días, el niño de 1 año empezó a gatear, pararse y hablar palabras por primera vez.
Greg escuchó la historia de Nabil con asombro. Ambos hombres comenzaron a alabar al Gran Médico, Jesús, el Dios que sana.
Un día posterior Greg volvió al apartamento de Nabil y le entregó una Biblia. ¡Él informó que el mensajero celestial se le apareció por segunda vez!
“¡La luz volvió a mí otra vez anoche con un mensaje!” En este sorprendente sueño Jesus le dijo: “Una gran señal, un hermoso mensaje, te llegará mañana, la señal es tan grande que debe ser compartida por todo el mundo y con cada persona”.
-Greg, ¿cuál era la señal? -preguntó Nabil. -Lo tienes, ¿no?
Greg señaló la Biblia. “El mensaje está aquí, Jesús es la señal, Jesús nos libera del pecado para darnos una nueva vida, vamos a leerlo juntos, Nabil”.
Como resultado de los dos poderosos sueños, la Palabra y el Espíritu tocó a Nabil, nació de nuevo y está creciendo en su nueva fe con la ayuda de Greg.
Fuente: Charisma News
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